Al retomar la actividad física, y en especial si viene acompañada de una dieta de adelgazamiento, siempre recomiendo empezar por disciplinas que nos permitan entrar gradualmente en la práctica deportiva. Hablo de caminar, andar en bicicleta (estática o en carretera), de correr y de nadar. Ahora está muy de moda el running, pero no es una actividad aconsejable en una primera etapa para quien está muy bajo de forma o soporta un sobrepeso considerable. Puede tener efectos negativos sobre nuestro sistema cardiovascular, tendones, músculos y articulaciones.