Nuestros músculos y huesos empiezan notan los efectos de los kilos de más y comienzan a aparecer de forma temprana dolencias que, como la artritis, deberían surgir más bien en la vejez.
Y es que los datos no engañan. En estudios realizados sobre utilización de prótesis para paliar daños irreversibles en las articulaciones se constata que el número de operaciones de rodilla se ha incrementado notablemente en los últimos veinte años. Lo llamativo es que el aumento se ha producido sobre todo en individuos menores de 45 años, algo a priori paradójico.
¿Por qué ocurre esto? Al analizar los datos asociados en los historiales clínicos, se ha descubierto que la mayoría de las personas que han sido intervenidas de dolencias de rodilla y que tenían menos de 45 años padecían también de un notable sobrepeso.
Adelgazamiento o cirugía
Debido a la obesidad, la investigación señala que nos encontramos con más personas jóvenes que ancianas afectadas de problemas de rodilla. Desarrollan la artritis a edades más tempranas fundamentalmente por causa de la obesidad. Y lo que es peor, muchas de ellas tendrán que ser operadas varias veces a lo largo de su vida.
Pero quizá lo que más nos debe alarmar a todos es el siguiente hecho que se menciona en el estudio: a pesar de que la relación entre obesidad y daño articular es bien evidente, muchos hombres y mujeres afectadas por este tipo de enfermedades óseas prefiere ignorar la influencia de los kilos de más.
Es decir, aun sabiendo que con una reducción importante de peso (algo que está por completo a su alcance) podrían mejorar mucho, no adelgazan y pasan por el trance del dolor y del quirófano.
Por desgracia, esta conducta está muy extendida con respecto a muchas otras patologías asociadas a la obesidad. Aunque el cuerpo proporciona señales claras de que el exceso de peso está causándoles enfermedades, y pese a conocer que una cura de adelgazamiento ayudaría a mitigar e incluso erradicar muchas de ellas, muchas personas ignoran las señales y no cambian su estilo de vida.
Sin embargo, hay que insistir en el mensaje de que una pequeña modificación de nuestros hábitos tiene notables beneficios. Debemos intentarlo.